Vértigos y Mareos - FisioClinics Sabadell

En FisioClinics Sabadell sabemos que el padecimiento de Vértigo y Mareo puede llegar a ser muy indefinido y estar asociado a múltiples factores desencadenantes que en algunas ocasiones será difícil de identificar. En el siguiente artículo podrás encontrar toda la información directamente relacionada con el Vértigo y cómo es tratado en nuestra clínica de Fisioterapia en Sabadell 

¿Qué es el Vértigo?

Antes de definir al Vértigo, es esencial conocer las estructuras encargadas de mantener el equilibrio y propiocepción, siendo: 

• La vista.
• El oído.
• Propioceptores. 

Dichas estructuras trabajan en armonía en la captación de múltiples estímulos externos que nos permiten identificar la posición del cuerpo con respecto al espacio en el que estamos siendo vital para el mantenimiento del equilibrio. Cuando se presenta algún tipo de falla sobre una de estas estructuras, los estímulos no pueden ser correctamente procesados en la corteza cerebral, por tanto, la noción propioceptiva se pierde dando inicio en la sensación de Vértigo. 

El Vértigo es considerado un síntoma, no una enfermedad como tal. Dicho síntoma aparece de forma única y aislada por múltiples causas en concreto o puede aparecer como parte de alguna patología presente. 

El Vértigo produce una sensación de inestabilidad y desequilibrio, provocando gran inseguridad e incapacidad para realizar ciertos movimientos desencadenando incluso sensaciones de náuseas y desmayo.

¿Cuáles son los síntomas del Vértigo y los Mareos?

El Vértigo puede presentarse de distintas maneras, entendiéndose como la pérdida de la orientación en tiempo y espacio, presente de manera aguda o crónica, suele relacionarse con síntomas como: 

• Náuseas agudas.
• Sensación de movimiento sin cambios notables en la cabeza
• Pérdida de equilibrio.
• Incoordinación 
• Tendencia a caer.
• Vómito.
• Presión en el oído
• Ruidos unilaterales del oído. 

¿Qué causa el Vértigo y los Mareos?

Como se mencionó anteriormente, el Vértigo no es una patología en sí, sino que más bien es una alarma que indica un trastorno sobre alguna de las estructuras encargadas de controlar el equilibrio. Pueden aparecer ciertas enfermedades a nivel visceral u otros órganos que comprometen al equilibrio y pueden relacionarse con el Vértigo y Mareo siendo las siguientes: 

• Enfermedad de Ménière
• Inflamación del nervio del equilibrio (llamada neuritis vestibular).
• Vértigo posicional paroxístico benigno.
• Vestibulopatía.
• Paroxismo vestibular
• Migraña basilar o vestibular.
• Accidente cerebrovascular o un ataque isquémico transitorio 
• Neuroma acústico.
• Fallo laberíntico.

Otros factores causales que pueden ocasionar Vértigo y Mareos son:

• Problemas en la musculatura cervical
• Una disfunción craneal: El nervio vestibular puede verse afectado por su compresión en los canales intracraneales que recorre debido a una mala movilidad y biomecánica de los huesos, músculos y duramadre craneal, pudiendo alterar la función nerviosa del VIII par craneal.
• Una falta de movilidad cervical.
• Falta de movilidad de la columna cervicodorsal
• Mal posición de otolitos., pudiendo desencadenar vértigo, en concreto el llamado Vértigo posicional paroxístico benigno (VPPB).
• Alteración del sistema propioceptivo.

¿Cómo se realiza el diagnóstico médico del Vértigo y Mareos?

Para lograr un correcto diagnóstico del Vértigo, será necesario aplicar un examen físico y clínico detallado, donde se puedan incluir exámenes como: 

• Audiometría 
• Radiografías de la columna cervical.
• Tomografía Computarizada. 
• Imágenes de resonancia magnética.
• Electroencefalograma.
• Ecografía (ecografía Doppler) de las arterias.
• Medición de la presión del líquido cefalorraquídeo (presión del líquido cefalorraquídeo).
• Estudio del procesamiento de estímulos en el cerebro.
• Análisis de sangre.
• Electromiografía, un estudio de la conducción hacia los músculos.
• Electroneurografía, un estudio de la función de los nervios periféricos.