La hipermovilidad articular se presenta cuando una persona tiene una movilidad superior a la media en sus articulaciones. Aunque muchas veces se asocia a ventajas como flexibilidad o agilidad, en realidad puede ser un factor de riesgo para lesiones musculoesqueléticas, dolor crónico o inestabilidad. La fisioterapia especializada ofrece herramientas clave para controlar los síntomas, estabilizar las articulaciones y prevenir complicaciones a largo plazo. En FisioClinics Sabadell, abordamos la hipermovilidad desde una perspectiva funcional, adaptada a cada paciente y su estilo de vida.
¿Qué es la hipermovilidad articular?
La hipermovilidad es la capacidad anormal de las articulaciones para moverse más allá de su rango fisiológico. Puede ser generalizada o localizada, y estar presente desde la infancia. En muchos casos no produce síntomas, pero en otros puede provocar molestias significativas o asociarse a síndromes como el de Ehlers-Danlos.
Principales características:
- Articulaciones que “se doblan de más”
- Luxaciones o esguinces recurrentes
- Dolor muscular o articular sin causa aparente
- Fatiga física, especialmente tras el ejercicio
- Problemas de equilibrio o coordinación
¿Es una condición médica?
En algunos casos, la hipermovilidad forma parte de un trastorno del tejido conectivo que afecta a ligamentos, piel y vasos sanguíneos. El Síndrome de Hipermovilidad Benigna o el Síndrome de Ehlers-Danlos tipo hipermóvil requieren atención médica y fisioterapéutica conjunta.
Sin embargo, muchas personas tienen hipermovilidad sin diagnóstico médico, y aún así se benefician enormemente de la intervención fisioterapéutica para evitar lesiones y mejorar su calidad de vida.
Evaluación fisioterapéutica
En FisioClinics Sabadell, la valoración inicial incluye:
- Test de Beighton para evaluar el grado de hipermovilidad
- Análisis de la postura y la marcha
- Estudio del control motor
- Identificación de puntos débiles articulares y musculares
- Valoración funcional según actividad física o necesidades laborales
Objetivos del tratamiento
La fisioterapia no busca “corregir” la hipermovilidad, sino compensar sus efectos negativos, promoviendo:
- Estabilidad articular
- Control neuromuscular
- Reducción del dolor
- Prevención de esguinces, luxaciones o sobrecargas
- Mejora de la confianza en el movimiento
Técnicas y estrategias utilizadas
1. Ejercicios de fortalecimiento
La clave está en fortalecer los músculos que rodean las articulaciones hipermóviles:
- Trabajo de fuerza en rangos seguros
- Activación del core para estabilizar la pelvis y columna
- Fortalecimiento específico de rodillas, tobillos y hombros
2. Entrenamiento de control motor
Se enseña al cuerpo a moverse con precisión y estabilidad:
- Ejercicios de equilibrio y propiocepción
- Trabajo con plataformas inestables
- Coordinación de movimientos lentos y controlados
3. Educación postural y ergonomía
Enseñar al paciente a:
- Evitar posiciones de reposo en hiperextensión
- Mantener alineaciones articulares correctas
- Organizar el entorno para evitar sobreesfuerzos
4. Técnicas de terapia manual
Pueden aplicarse para aliviar contracturas o liberar tensión en zonas sobrecargadas, siempre con precaución en articulaciones inestables.
5. Pautas de autocuidado
El fisioterapeuta orienta sobre:
- Ritmo de ejercicio físico adecuado
- Uso de ortesis o vendajes si es necesario
- Control del estrés (que puede aumentar el dolor en personas hipermóviles)
Conclusión
La hipermovilidad articular no tiene por qué limitar la vida diaria ni el rendimiento físico. Con un enfoque fisioterapéutico centrado en la estabilidad, la fuerza y la conciencia corporal, es posible reducir el riesgo de lesiones y mejorar la funcionalidad. En FisioClinics Sabadell, ofrecemos un tratamiento individualizado, centrado en las necesidades específicas de cada paciente con hipermovilidad, para que puedan moverse con seguridad y confianza.