Las calcificaciones musculares son una alteración en la que se depositan sales de calcio en el tejido muscular, generalmente como consecuencia de una lesión mal curada o de procesos inflamatorios persistentes. Aunque pueden pasar desapercibidas, en muchos casos provocan dolor, rigidez y limitación funcional en la zona afectada. La buena noticia es que la fisioterapia ofrece tratamientos eficaces y no invasivos para reducir el dolor, mejorar la movilidad y prevenir secuelas. En Fisioclinics Sabadell, contamos con fisioterapeutas especializados en el tratamiento de calcificaciones musculares con técnicas personalizadas según cada caso.
¿Qué son las calcificaciones musculares?
Una calcificación muscular es la formación de depósitos de calcio en el interior del tejido muscular, normalmente como respuesta a:
- Traumatismos directos o contusiones.
- Desgarros musculares mal curados.
- Hematomas profundos que no se reabsorben correctamente.
- Inflamaciones prolongadas o sobrecargas mecánicas continuas.
Este fenómeno también se conoce como miositis osificante, especialmente cuando el calcio forma una masa parecida a hueso dentro del músculo.
¿Cómo se manifiestan?
Las calcificaciones pueden no dar síntomas al inicio, pero a medida que se desarrollan pueden causar:
- Dolor localizado o irradiado.
- Inflamación y endurecimiento del músculo.
- Disminución de la fuerza o del rango de movimiento.
- Sensación de nódulo duro o masa palpable.
- Dolor al estirar o contraer el músculo afectado.
Son frecuentes en zonas como cuádriceps, bíceps, deltoides o glúteos, sobre todo en personas activas o deportistas.
Diagnóstico de las calcificaciones musculares
El diagnóstico se basa en:
- Historia clínica y exploración física.
- Pruebas de imagen: radiografías (para ver el depósito cálcico), ecografía musculoesquelética o resonancia magnética.
Es importante descartar otras causas de dolor muscular, como roturas fibrilares, fibrosis o lesiones tendinosas.
Tratamiento fisioterapéutico de las calcificaciones musculares
El objetivo del tratamiento es:
- Aliviar el dolor.
- Mejorar la función muscular.
- Evitar el crecimiento de la calcificación.
- Prevenir nuevas lesiones en la zona.
1. Terapia manual
- Masaje terapéutico para relajar la musculatura periférica.
- Técnicas de liberación miofascial para mejorar el tejido circundante.
- Drenaje manual si hay restos inflamatorios o edema.
2. Estiramientos controlados
- Estiramientos suaves y progresivos para mantener o recuperar la elasticidad muscular.
- Evitan adherencias y rigideces secundarias.
3. Ejercicio terapéutico
- Programa de fortalecimiento funcional y adaptado, sin dolor.
- Mejora la vascularización del área y previene la atrofia muscular.
- Se ajusta en función de la localización y tamaño de la calcificación.
4. Electroterapia y tecarterapia
- Técnicas como TENS o ultrasonido terapéutico ayudan a reducir el dolor.
- La tecarterapia mejora el metabolismo celular y favorece la regeneración del tejido afectado.
5. Ondas de choque (en casos seleccionados)
- En algunas calcificaciones bien delimitadas, las ondas de choque extracorpóreas pueden fragmentar los depósitos cálcicos, facilitar su reabsorción y reducir el dolor.
- Se utilizan siempre bajo supervisión profesional y según indicación médica.
6. Educación y prevención
- Enseñamos al paciente cómo adaptar su actividad física, evitando gestos que perpetúen la inflamación.
- En deportistas, se corrige la técnica o planificación del entrenamiento si es necesario.
¿Se necesita cirugía para eliminar las calcificaciones?
Solo en casos excepcionales en los que:
- El depósito calcificado es muy grande.
- Hay compresión de nervios o estructuras importantes.
- El dolor y la limitación funcional no mejoran con tratamiento conservador.
La fisioterapia es eficaz en la gran mayoría de los casos y ayuda a evitar intervenciones quirúrgicas innecesarias.
¿Cómo prevenir nuevas calcificaciones?
- Tratar correctamente las lesiones musculares desde el inicio.
- No aplicar calor ni masaje intenso sobre hematomas recientes.
- Recuperar la actividad física de forma progresiva y guiada.
- Mantener una musculatura elástica y equilibrada con ejercicios adecuados.
En Fisioclinics Sabadell te ayudamos no solo a tratar las calcificaciones, sino a evitar que se repitan, con un enfoque personalizado y basado en la evidencia.
Conclusión
Las calcificaciones musculares son una secuela común de lesiones mal gestionadas, pero con el tratamiento fisioterapéutico adecuado es posible aliviar los síntomas, mejorar la función y evitar complicaciones. La clave está en una intervención precoz, guiada por profesionales con experiencia en patología musculoesquelética. En Fisioclinics Sabadell te ofrecemos un tratamiento integral, seguro y personalizado para ayudarte a recuperar tu bienestar y volver a tus actividades sin dolor. Si notas un bulto duro, rigidez o dolor persistente tras una lesión muscular, consúltanos: tu recuperación puede comenzar hoy mismo.